ʉⱷⱺCAPITULO:21ʉⱷⱺ:

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En ese instante Osagi se despertó de pronto, sentía una sensación de ahogo y estaba sudando, acababa de tener esa horrible pesadilla y la verdad es que ahora se sentía algo mal, así que se levantó de la cama y salió de la habitación, seguía algo agitado por culpa de la pesadilla, al llegar a los jardines se sentó en uno de los asientos que había allí y respiró profundo.
-Osagi: Vamos Osagi que solo ha sido una pesadilla, no debo de darle mas importancia, pero ¿y si esa pesadilla es un aviso de algo? No se si darle importancia a la pesadilla o no, em creo que hablaré sobre esto con Asagi.
Osagi se levantó rápidamente y en ese instante se chocó con su hermano.
-Asagi: Mas cuidado Osagi ¿a donde ibas con tanta prisa?
-Osagi: A buscarte, tengo que hablar contigo.
-Asagi: ¿Que ha pasado? Te noto algo alterado.
-Osagi: No es nada importante creo.
-Asagi: Bueno pues dime,ya que ahora mismo tenemos tiempo de hablar, aun es media tarde.
-Osagi: Tienes razón, bueno pues te lo diré, supongo que puede que no sea para estar tan alterado, pero es que ha sido tan terrible.
-Asagi: ¿Que ha ocurrido Osagi? ¿pero tu no te ibas a descansar un rato?
-Osagi: Si.
-Asagi: Pues dime que es eso que te ha ocurrido por que no entiendo nada.
-Osagi: Verás hermano, he tenido una pesadilla bastante horrible y me he despertado algo alterado y preocupado.
-Asagi: A ver cuéntame esa pesadilla, pero te aviso Osagi solo ha sido una pesadilla, no hay que darle mas importancia.
-Osagi: Lo se hermano, pero es que ha sido horrible y tengo miedo de que sea un aviso.
-Asagi: Cuéntamela.
-Osagi: Esta bien hermano te la resumiré.
-Asagi: Adelante.

-Osagi: Verás en la pesadilla yo iba caminando sin rumbo por un camino en el cual había muchísima niebla, tras un rato caminando sin parar llegué a un torreón y sin dudarlo entré. Una vez dentro subí unas escaleras y llegué a una sala en la que había una puerta, me acerqué a la puerta y traté de abrirla pero estaba cerrada así que iba a salir de allí cuando oí tu voz que provenía de dentro de la habitación que estaba cerrada, tu me pedías ayuda, yo trataba de abrir la puerta pero no podía. Tras unos minutos tu comenzabas a gritar y yo veía por la rendija de la puerta el fuego, tu pedías ayuda y gritabas que la habitación estaba ardiendo y que te sacara de ahí, yo trataba de abrir la puerta, la golpeaba pero no se abría, tras unos minutos yo seguía golpeando la puerta hasta hacerme sangrar las manos, pero no podía abrir, oía tus gritos de desesperación y dolor. Fue horrible pasados unos minutos dejaste de gritar, hermano fue terrible te quemaste y yo no pude hacer nada por ayudarte, me sentía tan destrozado y tan culpable que subí a la azotea del torreón y me lancé al vacío, en ese punto me desperté.
-Asagi: Que horrible pesadilla hermano, ahora entiendo por que estas tan alterado pero no te preocupes Osagi ha sido solo una pesadilla, no creo que sea aviso de nada, es solo que estos días has tenido y tienes muchas preocupaciones y eso te hace tener esas pesadillas tan horribles, hermano no le des mas importancia.
-Osagi: Esta bien hermano, la verdad es que contártela a ti me ha echo sentir un poco mejor.
-Asagi: ¿Estas mas tranquilo?
-Osagi: Si, pero aun así estaré atento, no quiero que nada malo te pase.
-Asagi: Esta bien hermano, nos protegeremos el uno al otro.
-Osagi: Si.
-Asagi: La verdad es que aun me suena raro decir esa frase jeje, ya que hace unos días me odiabas.
-Osagi: Hermano no era odio, creo que nunca te he llegado a odiar, simplemente estaba imbécil y toda esta situación me ha echo abrir los ojos, debemos de estar juntos y protegernos.
-Asagi: Estoy de acuerdo contigo hermano, juntos salvaremos nuestro reino a nuestra gente y acabaremos con ese gigante y con el mal nacido que ha echo el hechizo.
-Osagi: Si hermano juntos venceremos. Bueno ya esta oscureciendo y creo que va siendo hora de que vaya a buscar la puerta.
-Asagi: Esta bien hermano, nos vemos a la hora de la cena.
-Osagi: Esta bien, oye hermano.
-Asagi: Dime.
-Osagi: ¿Me podrías acompañar a por el carro? Es que no se donde los tienes.
-Asagi: A si claro que te acompaño, ven.
Osagi y Asagi se dirigieron a la parte trasera del palacio, allí en una gran sala estaban los carruajes de Asagi, tenia unos cuantos, unos eran mas llamativos que otros.
-Osagi: Así que estos son tus carruajes, hum interesante jeje sobretodo aquel.
Osagi señaló un carruaje que era bastante llamativo, ya que era de un color amarillo chillón.
-Asagi: Ese fue un regalo.
-Osagi: ¿De quien? Por que la verdad es que tiene muy mal gusto para elegir carruaje.
-Asagi: Jaja hermano ahora mismo no me acuerdo quien me lo regaló, pero lo que si se es que no lo he usado ni una vez.
-Osagi; No me extraña, si usaras ese carruaje irías llamando la atención por donde fueras jaja.
-Asagi: Hermano deja de reírte de ese carruaje y elige otro.
-Osagi: Pues es obvio que me llevo aquel de allí.
Asagi miró hacia donde estaba señalando su hermano.
-Asagi: Buena elección.
-Osagi: Es el menos llamativo que tienes.
El carruaje que Osagi había elegido era un carruaje normal y corriente de color negro sin ningún adorno en especial.
Osagi se acercó al carruaje y se subió.
-Asagi: ¿Sabes conducirlo?
-Osagi: Por favor hermano ¿que pregunta es esa? Anda traeme los caballos.
-Asagi: Voy.
Asagi se fue hacia los establos y Osagi se quedó allí esperando a que su hermano volviera con los caballos.
Tras unos minutos Asagi volvió con dos caballos, Osagi lo ayudó a atarlos al carruaje y después se subió y agarró las riendas.
-Osagi: Bueno pues nos vemos a la hora de la cena.
-Asagi: Esta bien, cuando vuelvas desata los caballos y los llevas a los establos.
-Osagi: Si Asagi.
-Asagi: Hasta luego.
-Osagi: Hasta luego.
Asagi se quedó allí parado y Osagi salió de allí, condujo el carro hasta la herrería, una vez allí aparcó el carro, se bajó y entró a la herrería.
-Osagi: Hola.
-Herrero: Hola mi lord, la puerta que me encargo esta ya preparada, espere un momento que se la traigo.
-Osagi: Esta bien.
El herrero se fue a buscar la puerta y Osagi se quedó esperando, tras unos minutos el herrero volvió con una puerta no muy grande.
-Herrero: Aquí esta, espero que sea de su agrado.
-Osagi: Es perfecta, muchas gracias has echo muy buen trabajo.
-Herrero: Gracias mi lord, es un placer trabajar para usted.
-Osagi: Ten el dinero acordado, como te dije te he puesto dos monedas de oro como propina.
-Herrero: Muchas gracias mi lord, pero no tenia que dejarme propina, es mi trabajo.
-Osagi: Pero yo he querido dejarte una propina, así que no me discutas y aceptala.
-Herrero: Esta bien mi lord, muchísimas gracias y cualquier cosa mas que necesite no dude en pedírmela.
-Osagi: Así lo haré, ten.
Osagi le dio una pequeña bolsita de tela que contenía las monedas, el herrero la agarró y se la guardó.
-Herrero: Muchas gracias mi lord, por cierto aquí tiene las dos llaves, tenga mucho cuidado con ellas ya que son las únicas copias de la llave, si las pierde no podrá abrir la puerta.
-Osagi: Esta bien, tendré mucho cuidado con las llaves y las guardaré muy bien.
Osagi agarró las llaves y se las guardó en la pequeña bolsa de cuero que llevaba colgada de su cinturón, agarró la puerta y salió de la herrería despidiéndose del herrero.
Caminó a paso ligero hacia el carruaje, metió la puerta se subió y volvió al palacio de Asagi.