ʉⱷⱺCAPITULO:10ʉⱷⱺ:

ʉⱷⱺCAPITULO:10ʉⱷⱺ:

Cerró los ojos y se quedó dormido de nuevo. A los pocos minutos alguien salió de detrás del gran armario y se acercó a la cama, esa persona se había colado en la habitación de Osagi antes de que este llegara y había esperado pacientemente la llegada de Osagi y a que se durmiera. Esa persona se acercó con mucho cuidado a Osagi, agarró uno de los cojines y lo puso sobre el rostro de Osagi, comenzó a apretar el cojín cada vez mas fuerte. En ese preciso instante Osagi se despertó y comenzó a forcejear con el individuo, Osagi apretó con todas sus fuerzas hasta que consiguió apartar el cojín de su cara, dio un fuerte empujón al individuo y este cayó al suelo, entonces Osagi se levantó de la cama y se aproximó al individuo para ver quien lo había intentado matar.
Al acercarse al individuo solo vio a un chico de unos 16 años y que estaba muy asustado.
-Chico: Yo...perdóneme.
-Osagi: ¿Por que has intentado matarme? Mejor dicho ¿quien te envía?.
-Chico: A mi...un...un hombre me paró en un callejón y me fijo que si mataba al rey Osagi del reino de la oscuridad, me daría mucho oro. Mi lord lo siento pero no pude negarme ya que mi madre y yo estamos viviendo en la calle, necesitaba ese dinero.
-Osagi: ¿Como era el hombre que te pagó?.
-Chico: Era rubio con el pelo un poco ondulado, sus ojos eran azul intenso y llevaba unos ropajes bastante caros.
-Osagi: Es Kamijo, joder él te ha enviado para que me mates, es un bastardo.
-Chico: Mi...mi lord, no me mate.
-Osagi: ¿Que no te mate? Tu has intentado matarme ¿y pretendes ahora que yo no te mate?
-Chico: Por favor mi lord.
-Osagi: Esta bien no te mataré, pero vete de mi reino, vete no quiero verte por los calles de mi reino ¿te has enterado? Como te vea por las calles de mi reino te juro que te mato con mis propias manos ¿te ha quedado claro?.
-Chico: S..si.
-Osagi: Pues ahora vete de mi palacio ¡Fuera!.
El chico abrió la puerta y salió de la habitación corriendo. Osagi se acercó a la puerta y la cerró de nuevo con llave, pero esta vez la llave la quitó y se la guardó en el bolsillo del pantalón.
-Osagi: Estúpido Kamijo, me las vas a pagar todas juntas.

Osagi comenzó a caminar de un extremo al otro de la habitación, se sentía muy molesto por lo que acababa de ocurrir, tras unos minutos caminando por la habitación sin parar, se sentó en la cama allí se quedó pensativo, después de unos minutos ya se agobiaba dentro de esa habitación así que se levantó de la cama se puso el chaquetón y salió de palacio, caminó rápido y se adentró en el bosque, allí caminó y caminó sin parar hasta que llegó a su cabaña, entró y cerró la puerta con llave, para mas seguridad también la atrancó con una silla.
Se dirigió al pequeño salón y allí se sentó en el sillón, aun se sentía nervioso por lo ocurrido, Kamijo lo había mandado a matar, ese estúpido odiaba mucho a Osagi.
Osagi se levantó del sillón y se asomó por la ventana, aun era noche cerrada y por la ventana no se veía mas que oscuridad, este volvió al sillón pero no estuvo ni cinco minutos sentado, ya que se volvió a levantar y comenzó a caminar de un extremo al otro del pequeño salón, Osagi se sentía nervioso y asustado ya que acababan de intentar matarlo, si no se hubiera despertado si hubiera sido de sueño pesado ahora mismo estaría muerto, por suerte Osagi era de sueño ligero y se solía despertar con cualquier ruido.
De pronto un golpe alertó a Osagi, este se acercó a la venta y vio una silueta que iba con un pequeño farolillo, dicha silueta se estaba aproximando a la cabaña, Osagi se quedó asomado a la ventana observando a esa silueta.
La persona se acercó a la puerta y dio unos golpes.
Osagi se quedó muy quieto observando a través de la ventana, pero no lograba ver la cara de aquel individuo.
Osagi dentro de la cabaña estaba con el farolillo apagado así que con un poco de suerte aquel individuo se piense que en esa cabaña no hay nadie y se vaya.
Tras unos minutos aquel individuo se fue de allí, Osagi respiró tranquilo, se alejó de la ventana y se sentó de nuevo en el sillón, allí estuvo a penas unos minutos por que se levantó de nuevo y comenzó a caminar por el salón, estaba nervioso e inquieto.
Pasaron las horas Osagi consiguió tranquilizarse un poco y se quedó dormido en el sillón.

Por la mañana temprano unos golpes en la puerta despertaron a Osagi, este se levantó y lentamente se acercó a la ventana para ver quien estaba llamando a la puerta, al asomarse a la ventana y ver a su hermano este sintió un gran alivio, se acercó a la puerta quitó la silla y abrió a su hermano.
-Asagi: Buenos días Osagi.
-Osagi: Oh hermano, no sabes cuanto me alegro de verte.
-Asagi: ¿Te ha pasado algo? Te noto algo alterado.
-Osagi: Pasa y te lo cuento.
Asagi entró, Osagi cerró la puerta y ambos se sentaron.
-Asagi: ¿Que te ha ocurrido?.
-Osagi: Algo horrible.
-Asagi: Dímelo ya, que me tienes en ascuas.
-Osagi: Esta bien. Anoche me fui a dormir pero antes cerré puerta y ventana, bien pues de pronto me desperté y tenia un cojín en mi cara. Hermano alguien estaba intentando asfixiarme.
-Asagi: ¿Enserio?.
-Osagi: Si hermano, han intentado matarme.
-Asagi: ¿Quien?.
-Osagi: Forcejeé y logré apartar el cojín de mi cara, empujé al agresor y vi que solo era un crio.
-Asagi: ¿El que trató de matarte era un crio?.
-Osagi: Si Asagi, esa chico no tendría mas de 16 años.
-Asagi: ¿Y por que trató de matarte?.
-Osagi: Kamijo le pagó para que me matara, ese chico vive en la calle con su madre y Kamijo le ofreció dinero a cambio de que me matara.
-Asagi: ¿Como lo sabes?.
-Osagi: Por que el chico me lo explicó todo, él estaba muy asustado, así que lo deje ir, hermano no pude matarlo era solo un crio.
-Asagi: Te entiendo Osagi.
-Osagi: Ese bastardo de Kamijo quiere acabar conmigo y me temo que no va a parar hasta que lo consiga.
-Asagi: Ah pues no lo va a conseguir, yo te protegeré hermano.
-Osagi: Gracias hermano.
-Asagi: Venga sal por la puerta de atrás y escondete en el carro.
-Osagi: Esta bien.
Osagi salió por la puerta trasera y hizo lo que le había dicho su hermano, así que Osagi se metió dentro del carro y se puso por encima toda la paja que pudo hasta quedar bien oculto, a los pocos segundos Asagi salió de la cabaña y se subió en el carro.
-Asagi: ¿Preparado para irnos?.
-Osagi: Si Asagi.
-Asagi: Bien pues en marcha.
El carro comenzó a moverse, Asagi decidió que irían por caminos secundarios y así había menos posibilidades de que alguien viera el carro.
Tras una rato al fin llegaron al palacio de Asagi, este metió el carro en las caballerizas, entonces avisó a su hermano y este salió del carro.
Asagi al ver a su hermano comenzó a reírse.
-Osagi: ¿Que ocurre?.
-Asagi: Jajaj nada, solo es que tienes el pelo lleno de paja y la ropa, jeje estas muy gracioso.
-Osagi: Oh pues yo no le veo la gracia, me pica todo el cuerpo.
Osagi comenzó a sacudirse para quitarse la paja, Asagi que no paraba de reírse ayudó a su hermano a quitarse la paja, este le quitó la paja del pelo mientras no dejaba de reír.
-Osagi: Hermano enserio no se que gracia le ves.
-Asagi: Es que estas muy gracioso.
-Osagi: Para de reír y ayudame.
-Asagi: Ya te estoy ayudando jeje, bueno ya esta ya no tienes paja en el pelo.
-Osagi: Uh pero me sigue picando todo el cuerpo.
-Asagi: Claro hermano que has estado metido entre la paja y no en oro.
-Osagi: ¿Que insinúas?.
-Asagi: Pues que en la paja hay pulgas.
-Osagi: ¿Que?.
-Asagi: ¿Que te esperabas que hubiera en la paja pepitas de oro?.
-Osagi: Joder no, pero haber tenido cuidado.
-Asagi: Por mucho cuidado que tenga, la paja seguiría teniendo pulgas.
-Osagi: Menuda incomodez, me pica todo el cuerpo.
-Asagi: Va no seas quejica.
-Osagi: Uh que no sea quejica me dice, tss claro como a ti no te pica todo el cuerpo.
-Asagi: Arrascate y no te quejes mas.
-Osagi: Ya me estoy arrascando, pero el picor no se va.
-Asagi: Uh que quejica eres de verdad. Venga vamos dentro que mandaré al servicio a que te prepare un baño.
-Osagi: Oh esa es buenísima idea.
-Asagi: Así dejaré de oír tus quejas.
Ambos hermanos rieron, Asagi le dio un golpecito en la espalda a su hermano.
-Asagi: Venga vamos dentro.
-Osagi: Si.
-Asagi: Sígueme.
Asagi comenzó a caminar en dirección a la puerta trasera de su palacio, Osagi lo seguía, este llevaba una manta vieja por encima a fin de parecer un pordiosero y que así nadie sospechara , los dos hermanos entraron a palacio por la puerta de atrás, allí no había nadie así que pasaron sin problemas, Asagi llevó a Osagi a una de las habitaciones libres, ambos entraron y Asagi cerró la puerta con llave.
-Asagi: Osagi siempre que estés dentro de la habitación tu cierra con llave.
-Osagi: Esta bien hermano.
-Asagi: Bien pues puedes salir cuando quieras de la habitación, pero Osagi bajo ningún concepto salgas de palacio ¿vale?.
-Osagi: Tranquilo hermano que no saldré de palacio, pero los sirvientes me verán si salgo de la habitación.
-Asagi: Ah por eso no te preocupes, si todo el servicio sabe de que vas a pasar unos días aquí y tranquilo que todos ellos son de mi confianza, tu tranquilo que ninguno de ellos dirá nada sobre tu estancia aquí.
-Osagi: Esta bien, confío en ti hermano.
-Asagi: Esta bien Osagi y ahora vamos a desayunar.
-Osagi: Está bien hermano. Pero recuerda lo del baño.
-Asagi: Si hermano después del desayuno le digo a uno de los sirvientes que te prepare un baño.
-Osagi: Gracias. Por que la verdad es que este picor me esta desesperando.
-Asagi: Anda deja ya de quejarte por el picor y vamos a desayunar.
-Osagi: A ti te es fácil decir eso ya que tu no tienes estos insoportables picores.
-Asagi: Te advierto Osagi, como te vuelva a oír quejarte del picor, te vas a quedar sin baño y entonces si que te vas a quejar cuando tengas que dormir con esos picores.
-Osagi: Esta bien ya me callo.
Ambos se dirigieron al salón y allí desayunaron tranquilamente, al acabar de desayunar Asagi hizo llamar a uno de sus sirvientes y le dijo que preparara un baño ara Osagi, el sirviente asintió y se fue a preparar el baño.
-Asagi: Al fin podrás bañarte y dejar de quejarte de una buena vez.
-Osagi: Si tu sintieras estos picores no te quejarías de mis quejas.
-Asagi: Anda ve que ya esta el baño listo.
-Osagi: Voy.
-Asagi: Osagi, cierra la puerta con llave.
Osagi asintió y se fue corriendo hacia el baño, al llegar vio que la bañera ya estaba preparada, metió la mano y el agua estaba en su punto así que Osagi cerró la puerta con llave y disfrutó de su relajante baño.